¿Sabemos digerir bien la información que recibimos?

En el mundo tan competitivo que estamos viviendo estamos siendo bombardeados constantemente con información.  Alguna de ella certera, otras quisieran serlo y otras son realmente falsas o sin valor alguno.  Esto no es menos cierto en el Puerto Rico que vivimos hoy en día, donde todos aparentemente saben de economía y finanzas, los comentaristas tienen el derecho de burlarse de los profesionales, gobernantes o empresarios, simplemente por ser prensa y en fin, la verdadera información se diluye dentro de un mar de burlas y críticas.

Cuando recibimos información no es necesario que busquemos la verdad absoluta, sin embargo si debemos validar si lo que se nos presenta es correcto o no.  Tenemos que evaluar la información o la idea presentada con paciencia, reconociendo que detrás puede ver algo importante o preciado.  Por lo tanto procedo a esbozarles algunas preguntas según el libro El Poder Interno, de Del Pe que te permite discernir sobre lo leído, escuchado o presentado y cómo lograr concluir más adecuadamente:

1. ¿Qué porcentaje de lo presentado puede ser posible?
2. ¿Qué porcentaje de lo presentado puede ser probable?
3. ¿Cuáles son las limitaciones presentadas?
4. ¿Cómo puede ser exitoso o cómo puede fracasar lo presentado?
5. ¿Cuáles son los efectos positivos o negativos de lo presentado ante otros, la sociedad y el medio ambiente?
6. ¿Se puede manejar los riesgos de forma segura?
7. Lo presentado o la información percibida, ¿está en correlación con los principios universales o realmente aporta a la negatividad y destrucción?

Cuando nos hacemos estas preguntas entramos en un proceso de digestión de la información, donde buscamos incidir en cuáles han de ser los beneficios y consecuencias, positivas o negativas para nosotros y para otros.   La próxima vez que escuches información confusa, temas no bien trabajados o simplemente una fabulosa idea, siéntate, relájate y tómate el tiempo de pensar.  Utiliza estas 7 preguntas y luego de todo ello crea el plan de acción de acuerdo a lo concluido.